Para su realización tuvimos en cuenta estos pasos:

Paso 1: Preparación de la Leche

  1. Calentamiento de la leche: Calienta un litro de leche en una olla hasta que alcance aproximadamente 85°C (185°F). Este paso ayuda a desnaturalizar las proteínas de la leche para que el yogurt tenga una textura más firme.
  2. Enfriamiento de la leche: Deja enfriar la leche hasta que alcance aproximadamente 43°C (110°F). Puedes acelerar este proceso colocando la olla en un baño de agua fría.

Paso 2: Inoculación

  1. Añadir cultivos de yogurt: Agrega 2-3 cucharadas de yogurt natural (con cultivos vivos) a la leche enfriada. Mezcla bien con una cuchara de madera.

Paso 3: Incubación

  1. Mantenimiento de la temperatura: Vierte la mezcla en los tarros de vidrio y cúbrelos con toallas para mantener el calor. Mantén la mezcla a una temperatura constante de 43°C (110°F) durante 4-8 horas. Esto se puede hacer colocando los tarros en una caja térmica o en un horno apagado pero tibio.
  2. Verificación del yogurt: Después de 4-8 horas, verifica si el yogurt ha alcanzado la consistencia deseada. Si es así, refrigera los tarros durante al menos 2 horas antes de consumir.

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PROPIEDADES DEL YOGURT : Ø   Se logra un bienestar general del organismo y un buen estado de salud Ø   La capacidad de regenerar completamente la flora intestinal es su propiedad más favorable, ya que esta se ve afectada por infecciones regulares, la mala alimentación y el consumo de antibióticos. Ø   Es de fácil digestión, gracias a las proteínas que contienen con un gran poder probiótico, que ayudan a eliminar sustancias carcinógenas y tóxicas, lo que mantiene activo y fortalece el sistema inmune.   Ø   También, es fuente de vitaminas, calcio, nutrientes y minerales, que previenen patologías y un deterioro en el tejido óseo; y protege al corazón, reduce los niveles de la presión arterial y mejora el funcionamiento, por lo que evita enfermedades cardiovasculares.
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RESULTADOS FINALES:  https://www.youtube.com/watch?v=3CpHhUtdRn0&t=43s&pp=ygUOWU9HVVJUIENBU0VSTyA%3D    El yogurt obtuvo una consistencia espesa y un sabor ligeramente ácido, resultado de la fermentación de la lactosa (azúcar de la leche) por las bacterias del yogurt (Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophilus). Para concluir, Al final del proyecto, los estudiantes aprendieron sobre el proceso de fermentación, la importancia de las bacterias en la producción de alimentos y cómo se puede aplicar la ciencia en la vida cotidiana para crear alimentos saludables.
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